Montaje de presión en FDA para prohibir Paraben

Los parabenos se comercializaron por primera vez en la década de 1950 y comúnmente se agregan a desodorantes, cremas dentales, champús, acondicionadores, lociones corporales y maquillajes. Se usan para prevenir la acumulación de hongos y bacterias en estos y otros productos, incluidos muchos artículos de supermercado.

Las preocupaciones sobre la seguridad del uso de parabenos han estado creciendo durante las últimas dos décadas. Un estudio británico llevado a cabo en 2004 descubrió que se podían encontrar pequeñas cantidades de parabenos en los tumores de mujeres que padecen cáncer de mama.

Este tipo de investigación llevó a la Unión Europea a prohibir el uso de parabenos en 2012. Ahora, los defensores de la salud en los Estados Unidos están presionando a la FDA para que tome medidas también.

Liderando la carga contra el uso de parabenos es la Campaña de Cosméticos Seguros, o CSC. Insisten, junto con un creciente número de investigadores en salud, en que los parabenos representan una amenaza legítima para la salud humana. Específicamente, el CSC dice que los parabenos manipulan el desarrollo y la funcionalidad de las hormonas humanas, posiblemente causando cáncer.

"Lo más preocupante es que se sabe que los parabenos interrumpen la función hormonal, un efecto que está relacionado con un mayor riesgo de cáncer de mama y toxicidad reproductiva", dice el CSC. "Los parabenos imitan el estrógeno al unirse a los receptores de estrógeno en las células".

El CSC quiere que los fabricantes se centren más en la fabricación de productos seguros que en la producción de artículos con una larga vida útil. "Algunas compañías han creado productos sin conservantes que tienen vidas útiles más cortas que los productos convencionales (de seis meses a un año), pero si se usan a diario, es probable que se agoten antes de que expiren", señala el CSC.