6 Síntomas, causas y prevención del zócalo seco

Realizar el trabajo dental es suficientemente doloroso, pero si debe extraerse un diente, es posible que se encuentre en un mundo de dolor más conocido como osteítis alveolar o cuencas secas.

Según WebMD.com, solo el 5 por ciento de las personas desarrollan un alveolo seco después de extraerse un diente. Afortunadamente (puedes dejar de sostener tu boca ahora), esta incómoda condición puede ser tratada ...

1. ¿Qué causa el zócalo seco?

Cuando se extrae un diente, se formará un coágulo de sangre en el orificio del hueso que quedará en los días posteriores a la extracción. El coágulo de sangre se forma como un medio de protección para los nervios y el hueso por debajo, y permite que tenga lugar la curación.

Sin embargo, si el coágulo de sangre desaparece (o se desaloja), puede producirse una toma seca cuando los nervios y el hueso se exponen repentinamente a todo tipo de irritantes dolorosos, incluidos alimentos, líquidos e incluso aire. Desafortunadamente, el alvéolo seco también deja el área de extracción propensa a dolores e infecciones terribles.

2. Síntomas del zócalo seco

Decir que el alveolo seco es doloroso es una subestimación para cualquiera que haya experimentado esta afección. Y aunque la molestia y la sensibilidad después de un procedimiento dental pueden ser comunes, el alveolo seco es un dolor intenso que no se disipa en unos pocos días a una semana.

Los síntomas adicionales de la alveolitis incluyen mal sabor de boca, mal aliento y un dolor característico que se irradia en el oído. También puede ver visiblemente una toma seca si mira dentro del orificio dejado por un diente extraído. Es probable que vea huesos blancos expuestos en la base del orificio, no un coágulo de sangre oscuro que debería estar presente como protección.

3. Fumar causa el zócalo seco

Si sospecha que fumar es un factor de riesgo enorme para el desarrollo de un alvéolo seco, ¡está en lo cierto! Según MedicineNet.com, fumar, o más específicamente, nicotina, hidrata zaps y el suministro de sangre en la boca. Esto puede interferir con la formación normal de coágulos de sangre en el área de extracción como parte del proceso de curación natural.

Si fuma una pipa, cigarros o cigarros intente dejar de fumar unos días antes de la extracción dental para evitar la toma seca. Además, verifique con su dentista si los medicamentos que está tomando lo hacen propenso a desarrollar alveolos secos.

4. Otras causas de zócalo seco

Además de fumar, el alveolo seco a menudo es causado por los medicamentos que toma. Por ejemplo, la anticoncepción oral (es decir, las píldoras anticonceptivas) puede interferir con la capacidad de coagulación de su cuerpo después de un procedimiento dental. Si toma estrógenos, pídale a su odontólogo que programe su cirugía en un momento en que obtiene los niveles más bajos de la hormona y durante los primeros 22 días del ciclo menstrual (cuando es más probable que el estrógeno esté más inactivo).

La formación de coágulos de sangre también puede verse obstaculizada en individuos con un hueso de la mandíbula denso, una infección preexistente (es decir, enfermedad periodontal) o la presencia de exceso de bacterias orales en la boca. Ciertos hábitos (es decir, fumar, enjuagar o usar una pajita) también pueden provocar el derramamiento de un trapo de sangre.

5. Precauciones posquirúrgicas

Después de una extracción dental, puede hacer su parte para evitar el alveolo seco siguiendo las instrucciones precisas para el cuidado posterior. La Clínica Mayo recomienda evitar cualquier bebida deshidratante durante al menos 24 horas (es decir, café, cafeína y alcohol) y también evitar el uso de una pajita. Elija alimentos blandos como batidos, yogur, puré de manzana en lugar de alimentos duros o picantes que pueden causar irritación.

Evite fumar durante las 48 horas posteriores a la cirugía y limpie su boca con un suave cepillado y enjuague con un enjuague con sal tibia después de las comidas y durante todo el día, mientras evita la extracción de la herida tanto como sea posible. Cualquier dolor o infección sospechosa se debe informar a su dentista inmediatamente.

6. Tratamiento de zócalo seco

Si el dolor persiste, debe ver a su dentista de inmediato. Si se diagnostica el alveolo en seco, su dentista puede programar citas de seguimiento para limpiar y empacar el zócalo cada pocos días con un vendaje especial para ayudar al proceso de curación y aliviar el dolor.

Su dentista también puede recetarle un medicamento antiinflamatorio no esteroideo (es decir, ibuprofeno o más fuerte) para aliviar el dolor y anestesiar el sitio de extracción. Si se sospecha infección, su dentista también puede recetarle un enjuague bucal o antibióticos orales.