Los cambios en el cerebro hacen que dormir bien por la noche sea más difícil, sugiere un estudio
Investigadores de la Universidad de Oslo en Noruega estudiaron recientemente los cerebros de 147 adultos noruegos cuya edad promedio era 54 años. Tomaron exploraciones al comienzo del estudio y luego otra vez cuando el estudio se completó, aproximadamente 3, 5 años después.
Su hallazgo principal: a medida que la materia gris del cerebro comienza a deteriorarse con la edad, se vuelve mucho más difícil que una persona adquiera una buena noche de sueño. La investigación demostró que aún era posible dormir toda la noche, pero lograr un sueño verdaderamente reparador se volvió más desafiante.
El descubrimiento de los investigadores está directamente relacionado con los cambios en el cerebro. A medida que una persona envejece, su corteza frontal comienza a reducirse, mientras que otras partes del cerebro se deterioran. El estudio mostró que esta contracción y deterioro afectaron las habilidades de razonamiento, planificación, memoria y resolución de problemas.
"La alteración del sueño es un síntoma tan común entre la población general y a menudo empeora a medida que envejecemos", señaló Anton Porsteinsson, director de atención, investigación y educación sobre la enfermedad de Alzheimer en la Facultad de Medicina y Odontología de la Universidad de Rochester. "Hay datos crecientes que sugieren que la alteración del sueño puede ser un factor de riesgo para los resultados pobres en términos de células cerebrales y otros problemas médicos también".
Aún así, los expertos en salud no creen que los adultos mayores deban renunciar a dormir bien por la noche. En su lugar, deben enfocarse en implementar estrategias que los ayuden a dormir lo mejor posible, como eliminar teléfonos inteligentes y tabletas del dormitorio, evitar el correo electrónico justo antes de acostarse, estar más activos físicamente durante el día y evitar el café, el té y otros bebidas con cafeína en la noche.