6 cosas que debes saber sobre la tartamudez
Todos tartamudemos de vez en cuando, pero algunas personas tienen dificultades con los impedimentos del habla a diario. Es un problema que a menudo comienza en la infancia y, para muchas personas, deja una marca duradera en su confianza, especialmente en situaciones sociales.
No existe una condición universal para la tartamudez y no existe una cura universal. Del mismo modo que algunas personas solo tartamudea en ciertas situaciones, como cuando hablan en público o frente a personas que las ponen nerviosas, las formas de terapia actualmente disponibles ayudarán a algunas personas, pero no a otras. Si usted o alguien que conoce lucha con tartamudeo ocasional o constante, se estará preguntando qué necesita saber sobre esta condición única. Con el Día Internacional de Concienciación sobre el Tartamudeo que tendrá lugar el 22 de octubre, parece ser el momento adecuado para explorar algunas de las investigaciones más importantes relacionadas con la tartamudez.
1. Causas
Dado lo generalizados que son los problemas con la tartamudez, es algo sorprendente que los investigadores aún no sepan qué causa el problema. Algunos expertos creen que está fuertemente ligado a la genética, lo que significa que si los padres o abuelos tienen problemas con el tartamudeo, entonces sus hijos o nietos pueden tener problemas de habla similares.
Por supuesto, un tartamudeo también puede estar relacionado con la propia experiencia de un individuo. Los traumas infantiles, en particular los relacionados con el habla, pueden provocar que una persona sufra un tartamudeo en el futuro. También puede surgir un tartamudeo si un individuo tiene ansiedad, una condición que puede hacer que hablar con los demás, y especialmente con los extraños, sea particularmente estresante y difícil.
2. Síntomas de tartamudeo
Las personas que tartamudean tienen problemas para formar palabras completas mientras hablan. En muchos casos, esto hace que repitan partes de las palabras o que prolonguen ciertos sonidos del habla. Para el hablante, puede ser difícil sacar las palabras, hasta el punto en que pueden parecer agotado o sin aliento solo tratando de completar una oración.
Las personas con casos más extremos de tartamudez en realidad pueden dejar de hablar o tener dificultades para comenzar a hablar en primer lugar. En casos menores, las personas pueden identificar palabras problemáticas, como las que comienzan o terminan con un sonido determinado, y pueden evitar intencionalmente integrarlas en su discurso.
3. Diagnosis
Debido a su prevalencia, después de todo, todos tartamudea de vez en cuando, en general es fácil identificar si alguien está luchando con la tartamudez. Sin embargo, es mucho más difícil determinar a) qué está causando el tartamudeo, yb) si hay un patrón de tartamudeo. Eso puede hacer que sea particularmente difícil encontrar una estrategia efectiva para la terapia del habla.
En los casos graves de tartamudez, el paciente será remitido a un patólogo certificado del habla y el lenguaje, que puede llevar a cabo una evaluación para determinar el alcance del problema. Esta evaluación se enfocará en una variedad de áreas, desde el índice de habla de un individuo hasta su capacidad para pronunciar ciertas palabras. Con el tiempo, esta terapia puede ayudar a una persona que lucha con la tartamudez a encontrar una estrategia para limitar el problema y ganar confianza al encontrarse en situaciones sociales.
4. Tratamiento temprano
Aunque nunca es imposible para un patólogo del habla certificado trabajar y ayudar a alguien que padece tartamudeo, idealmente esta relación entre el paciente y el profesional comienza temprano en la vida, como cuando surge el problema por primera vez. En pocas palabras, cuanto antes se identifique y trate un problema de tartamudeo, mayores serán las posibilidades de ayudar al individuo a manejarlo o incluso superarlo.
Los niños identificados como que tienen un problema potencial con el habla y específicamente tartamudean, se someterán a una evaluación para determinar si el problema es menor o incluso temporal, o si es probable que continúe si no se usa el tratamiento. Debido a que cada caso es diferente, no existe una rutina establecida para tratar el tartamudeo infantil.
5. Tratamiento conductual
Ya sea que el paciente sea joven, de mediana edad o mayor, la mayoría de los programas de tratamiento para el tartamudeo tienden a enfocarse en cambiar el comportamiento del individuo. El objetivo, como era de esperar, es ayudar al paciente a aprender estrategias que finalmente lo ayudarán a mejorar su rendimiento en situaciones de comunicación oral.
Una estrategia que usan los expertos certificados en el habla y el lenguaje es ayudar a los pacientes con problemas de tartamudez a controlar el ritmo al que hablan. Al desacelerar las cosas, el individuo puede planear la entrega de cada palabra, dándoles la oportunidad de corregir cualquier tartamudeo antes de que se vuelva audible. Monitorear y controlar la respiración es otra estrategia que puede ayudar a los pacientes a superar problemas con tartamudez.
6. Paciencia
La paciencia es de vital importancia para todos los involucrados en la terapia del habla centrada en ayudar a un individuo con tartamudez. Sin embargo, también es una parte importante de cualquier conversación entre alguien con tartamudeo y otra persona sin ese problema.
Para el individuo con un tartamudeo, debe enfocarse en comunicar sus palabras de manera tranquila y constante. En lugar de ponerse nerviosos y pronunciar sus palabras rápidamente, como muchas personas con tartamudez tienden a hacer, deben centrarse en entregar lentamente su mensaje. La paciencia también es importante para los que están del otro lado de la conversación, en lugar de mirar hacia otro lado o agitarse cuando alguien tartamudea, permanecer callado y dejar que la persona complete su punto. Puede ayudar mucho a alguien con tartamudeo a obtener la confianza que necesita para manejar su impedimento de habla.