La pérdida de sueño puede disminuir la tolerancia al dolor

Los resultados de un estudio realizado en el Centro de Investigación y Trastornos del Sueño en el Hospital Henry Ford en Detroit, monitorearon los patrones de sueño de 18 adultos sanos en dos grupos separados. El primer grupo se dejó dormir profundamente durante nueve horas durante cuatro noches; mientras que el segundo grupo promedió dos horas menos de sueño cada noche, durante cuatro noches.

Luego, los investigadores probaron los umbrales de dolor de cada grupo al pedir a los sujetos que mantuvieran un dedo sobre una fuente de calor radiante. Descubrieron que aquellos con más horas de sueño podían tolerar la fuente de calor durante aproximadamente un 25 por ciento más.

Estudios adicionales han llegado a conclusiones similares: que la pérdida de sueño aumenta la inflamación en todo el cuerpo, lo que aumenta las señales de dolor del cuerpo y la sensibilidad a los estímulos dolorosos.

Y debido a que la pérdida de sueño es una preocupación común de los pacientes con dolor agudo y crónico, este complejo vínculo entre el sueño y el dolor puede explicar por qué quienes padecen dolor crónico afirman que el dolor causa la pérdida de sueño, cuando los efectos de los analgésicos se reducen debido a pérdida crónica de sueño.

Fuente: New York Times