Cada aliento cuenta: 6 datos breves para el día mundial de la neumonía

Si bien muchos no consideran que la neumonía sea una amenaza grave para la salud, esta afección pulmonar puede afectar a casi cualquier persona, independientemente de su edad, sexo, raza o nivel de salud o estado físico. Según una investigación de la Clínica Mayo, la neumonía ocurre cuando una infección fluida (pus) infla los sacos de aire de uno o ambos pulmones, lo que resulta en una enfermedad potencialmente mortal.

Marquemos el Día Mundial de la Neumonía (el 12 de noviembre de 2016) mediante la revisión de seis hechos rápidos sobre esta grave infección pulmonar ...

1. Su riesgo de neumonía aumenta si ...

Como se mencionó en la introducción, la neumonía no discrimina en cuanto a la edad o el nivel de salud. Todos pueden verse afectados por la neumonía. Sin embargo, ciertas poblaciones, particularmente aquellas con sistemas inmunes comprometidos pueden estar en mayor riesgo.

Por ejemplo, la American Lung Association señala que las personas con un problema de salud crónico, como la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), las enfermedades cardiovasculares, el asma o la diabetes, tienen un mayor riesgo de neumonía. Además, las personas que fuman o abusan del alcohol, así como los niños pequeños y los adultos mayores de 65 años pueden desarrollar una enfermedad de neumonía de leve a grave.

2. La neumonía es una infección pulmonar grave

Una encuesta de 2016 de Ipsos MORI, encuestada en varios países europeos, señaló que sorprendentemente una de cada cinco personas no considera que la neumonía sea una afección pulmonar. Las conclusiones de la misma encuesta de Ipsos MORI indicaron que solo el 44 por ciento de los encuestados cree que ciertas formas de neumonía pueden ser contagioso.

Según una investigación de eMedicinehealth.com, aunque la gran mayoría de los casos de neumonía bacteriana no son muy contagiosos, la tuberculosis y la neumonía por Mycoplasma deben considerarse altamente contagiosas cuando se transmiten a través de la tos, los estornudos y la respiración.

3. Neumonía y adultos mayores

Aunque los adultos mayores de 65 años se consideran un mayor riesgo de desarrollar neumonía, las estadísticas de la Asociación británica del pulmón muestran que a muchos adultos mayores no les preocupa contraer la infección pulmonar grave.

Por ejemplo, la encuesta Ipsos MORI indica que ocho de cada diez encuestados mayores de 65 años no están preocupados por el riesgo de contraer neumonía, aunque el riesgo casi se duplica para las poblaciones de mayor edad. De hecho, los datos de Medscape.com señalan que más del 90 por ciento de todas las muertes relacionadas con la neumonía ocurren en personas mayores poblaciones.

4. Vacuna contra la neumonía

¿Sabe que existe una vacuna contra la neumonía? Los Centros para el Control de Enfermedades mencionan dos vacunas disponibles, una de las cuales está disponible para prevenir la neumonía en niños menores de 5 años y en niños mayores de 6 años de riesgo, llamada vacuna antineumocócica conjugada (o PCV13). La segunda vacuna, la vacuna antineumocócica polisacárida (o PPSV23), se recomienda para adultos mayores de 65 años.

Según el CDC, menos de un tercio de las personas en los grupos "en riesgo" saben que existe una vacuna contra la neumonía prevenible, y solo una de cada seis personas de alto riesgo ha sido vacunada.

5. Prevención de la neumonía

Sorprendentemente, si bien muchos consideran que la neumonía es una infección pulmonar potencialmente mortal, la American Lung Association (ALA) señala que el 44 por ciento de las personas creen que la neumonía puede tratarse, pero no prevenirse.

El ALA recomienda vacunarse contra la gripe anualmente, no solo para prevenir la gripe estacional, sino también para evitar que se convierta en neumonía. Hable con su médico para ver si también debe recibir una vacuna contra la neumonía neumocócica para prevenir la neumonía bacteriana.

6. Vive sano para prevenir la neumonía

Según la American Lung Association, un episodio inocente de gripe estacional puede convertirse rápidamente en neumonía si no se cuida adecuadamente. Haga su parte para evitar que la gripe se convierta en una infección respiratoria peligrosa al consumir una dieta saludable y hacer ejercicio todos los días para promover una mejor salud inmunológica.

Además, lávese las manos con frecuencia durante la temporada de gripe (es decir, si su familia o compañeros de trabajo están enfermos, si se suena la nariz, vaya al baño o cambie los pañales del niño) para evitar la propagación de enfermedades bacterianas. Si fuma, considere dejar de fumar para disminuir sus probabilidades de desarrollar neumonía u otra infección pulmonar.