Un estudio dibuja vínculos entre la apnea del sueño y la depresión
La apnea del sueño afecta aproximadamente a 18 millones de personas en los Estados Unidos. Es causado por un bloqueo en las vías respiratorias que provoca que el cerebro reciba oxígeno limitado durante el sueño. En efecto, hace que una persona tenga un sueño menos reparador, lo que lleva a varias dolencias físicas.
Ahora, un nuevo estudio de investigadores australianos muestra que la apnea del sueño también puede causar depresión. El estudio, que involucró a poco menos de 2.000 hombres de entre 35 y 83 años, se extendió a lo largo de un período de cinco años. Los participantes se sometieron a exámenes físicos y completaron cuestionarios para evaluar su nivel de somnolencia diurna. También se les hicieron preguntas sobre su salud mental.
Al final, el estudio mostró que los hombres que tenían apnea del sueño y mayor somnolencia diurna tenían entre cuatro y cinco veces más probabilidades de tener depresión que los hombres sin estas condiciones.
"La somnolencia diurna excesiva y la AOS severa se asociaron con la prevalencia y la aparición reciente de depresión en nuestra muestra de hombres basada en la comunidad, y la presencia de ambos se asoció con un riesgo aún mayor", señala el autor principal del estudio, el Dr. Carol. Lang.
Este no es el primer estudio que establece vínculos entre los problemas del sueño y la depresión. Un estudio de 2012 llevado a cabo por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) mostró que tanto hombres como mujeres que experimentaron problemas para dormir tenían tres veces más probabilidades de mostrar signos de depresión.